31 de Marzo del 2020
El coronavirus acecha a África y se multiplican las voces de alerta desde el continente. La semana pasada, fue Matshidiso Moeti, directora de la Organización Mundial de la Salud para África, quien calificó de “evolución dramática” el crecimiento de positivos en el continente. La doctora sudafricana salió al paso así ante la calma global por los pocos casos detectados en territorio africano: hasta ayer 4.807 positivos y 154 fallecidos en 47 países.
Ayer quien activó el botón de alarma fue la secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para África de la ONU, Vera Songwe. Señaló que el continente está a sólo dos o tres semanas de evitar una “tormenta tan brutal” como la de Italia o España. El también camerunés John Nkengasong, director del Centro de Control y Prevención de Enfermedades, sumó sus miedos: “Antes dije que era una amenaza inminente para el continente, ahora digo que es un desastre inminente”.
“Antes dije que era una amenaza inminente, ahora digo que es un desastre inminente”, dice John Nkengasong
Expertos en epidemias y emergencias humanitarias consultados advierten de que la progresión de coronavirus en suelo africano es similar a la de los países más afectados de Europa y amenaza con colapsar los frágiles sistemas sanitarios de muchos estados.
Según un informe del London School of Hygiene and Tropical Medicine al que ha tenido acceso este diario, a tenor de las cifras actuales la mayoría de los países africanos superarán los 1.000 casos cada uno en menos de un mes y llegarán a 10.000 casos pocos días después.
