11 de julio 2020, Héctor Luis Valdés Cocho
Hoy comenzado el día, me vino a la memoria dos nombres, dos rostros, dos guías.
La primera vestida de rosa, alma pura, valor y dignidad inquebrantable; un ejemplo de mujer.
El segundo un TITÁN de nuestra historia contemporánea, estirpe de líder indiscutible y sobre todo con una gran pasión y compromiso por la libertad de la tierra que orgullosamente lo vio nacer.
La vida no me dio el placer de conocerlos personalmente y en mi mente tengo solo recuerdos fugaces de lo que engañosamente se decía en el televisor de ellos dos.
Anécdotas contadas por familiares y amigos, que no es que hayan tenido la gracia de conocerlos, pero si eran más conocedores de la trayectoria de estos grandes.
Basándome en lo contado por ellos, es que me atrevo a escribir:
» …Cuando el cruel brazo del régimen los alcanzó, la oposición cubana sufrió un gran golpe, pero no un golpe mortal » …
Lo digo afirmando que #LauraPollán está en todas las mujeres que aman la justicia y la libertad…y qué #OswaldoPayá está ahí, en el corazón de todo hombre valeroso que siente la obligación de ver su tierra liberta, de abrazar una isla democrática.
La dictadura no los borró, eso lo afirmo; la dictadura los multiplicó.
Héctor Luis Valdés Cocho
Periodista del Heraldo de Cuba
